¿De qué va?

Dos sueños atormentan al protagonista de esta novela: en uno, cae interminablemente; en el otro, sueña que es Jesucristo, hace milagros y besa a una mujer a la que le habla de Usted. 

Este nuevo Jesús es un líder para una época en la que el Apocalipsis podría ya haber sucedido. Una especie de estrella de rock, político, hombre común, aburrido terapeuta, caudillo: todo eso y más entraña este Salvador, quien se hace acompañar de sus infaltables apóstoles, aunque sus hombres de confianza son «los muchachos», sus guardaespaldas surgidos directamente del «barrio».

Esta es la segunda novela que leo de Luis Humberto Crosthwaite. Mientras la leía, no podía evitar recordar las sensaciones que me dejó su otra novela, Idos de la mente: diversión, asombro, simpatía. Para la fortuna de sus seguidores (ya soy uno), aquí se repite un poco el estilo jugueton y creativo, lleno de disparate e imaginación.

Sin embargo, aunque también los temas resuenan, hay un enfoque distinto a su obra de músicos norteños. La historia va sobre el amor y deseo de estar con una mujer. Aquí caracterizado por Jesucristo, un hombre que actúa como tal ante la comunidad, los ayuda al darles consejos y apoyarlos cuando lo necesitan. No logra estar con ella, así que hace otras actividades, insuficientes para olvidar que desea estar con esa mujer que ama.

Algo sentí que le faltó a esta obra. Quizá algún personaje extra, o mayor desenfado para producir situaciones de humor. Por el argumento de la novela, de un Jesucristo que besa a una mujer y le habla de Usted, me imaginaba algo más lúdico y hasta paródico de la cultura pop. Si bien la sentí un tanto incompleta, Aparta de mí este caliz tiene momentos agradables e imágenes sumamente atractivas.