¿De qué va?
Aquí se narra la historia de un escritor que inventa a un novelista que inventó a un novelista que escribe o lee (¿con nosotros?) la novela de otro autor probablemente inventado.
La obra se convierte en un enigma que acelera a cada página nuestra curiosidad y nos enfrenta a las ambiciones y frustraciones de un grupo de personajes reductibles, tal vez, a uno solo. El garabato es la clave para la solución de un misterio policial donde el lector tiene sus propias conclusiones.
La ficción rige a la realidad tantas veces como ésta a la ficción, ahí donde todo puede girar dentro de un laberinto.
Opinión:
Una lectura fascinante. Desde que te sitúa en la historia y conforme se va desarrollando esta te engancha por completo. Mencionar la estructura del libro, pues por momentos parece como si se estuviera ante un ensayo, otras veces un análisis literario —desvela algunas cosas en los textos de los escritores novatos, como la personalidad del autor que se refleja en los textos de este. No tan visible a simple vista pero que si se analiza un poco está casi casi exhibida en un cartel con letras grandes. Que digo, no es algo que este mal o bien, cada quien hace su narrativa según cree debe de ser—, o a veces sí una novela como tal, de esas que te atrapan, que te regresan el gusto por la lectura y te recuerdan lo padre que es leer. El final, ahí queda lo que decía uno de los tantos protagonistas del libro, intrigante.
Mencionar aparte, lo poco que he leído de Leñero me ha gustado, y mucho. En su momento siempre experimentando—era un obsesivo de la forma—, buscando por aquí y por allá para al final darnos eso que de manera estética tan bonito se lee y se escucha. Lástima que ahora, en la actualidad, Leñero deseche esta etapa innovadora y atrevida de su obra.