Argumento:
Los animales de una granja se sublevan
victoriosamente contra sus dueños humanos, pero pronto surgen entre
ellos ambiciones y rivalidades que nos muestran la corrupción que
engendra el poder. Uno de los editores escribió, en referencia a este
libro: “...si la fábula tuviera como blanco los dictadores y las
dictaduras en general, la publicación no sería mal vista, pero dado que
el relato sigue con tan notoria fidelidad el curso histórico de la Rusia
de los Soviets y de sus dos dictadores, resulta por demás evidente que
la anécdota alude sin lugar a dudas a aquel país, excluyendo todo otro
régimen dictatorial. Además resulta por demás ofensivo que la casta
dominante de la fábula sea la de los cerdos...”
Si se preguntara: ¿Gozará cualquier tipo de opinión del derecho a ser
escuchado por fuerte que sea su impopularidad?, seguramente se recibiría
una respuesta afirmativa. Pero si particularizamos: ¿Qué les parece si
atacamos a Stalin? ¿Seguimos conservando el derecho a ser oídos en este
caso? Porque si la libertad vale algo, es por el derecho que otorga de
poder decir a los demás lo que no desean oír. Y George Orwell dijo lo
que “no debía” decirse.
Opinión:
Una novela corta que está
escrita como una fábula, los animales hablan(así textualmente) y el
lenguaje en que se narra es muy sencillo. La rebelión de los animales
—lo que creía antes de leerla como lo más importante— llega muy
rápido... Pero, momento, ya tienen la granja, ¿ahora cómo la van a
administrar?
Me gustó la parte pre-final del libro, está muy
buena y logra que te quedes pensando un rato sobre lo que estás leyendo.
El desarrollo-medio puede parecer tedioso pero al pasarlo lo que sigue
se disfruta muy bien. No sé si la dictadura de Stalin —este libro se
refiere directamente a su régimen— haya sido buena o mala, o la de
cualquier otro dictador, de lo que estoy seguro es que centrarse en una
cosa —en este caso, gobernar a un pueblo— sin hacer otra actividad es
tan peligroso como dañino pues se pierde la noción de todo lo que está a
tu alrededor.
Volvería a leer algo de George Orwell, quizá la tan famosa 1984.
Rebelión en la granja es un buen libro con partes que pueden gustar mucho e incitan a la reflexión.