Por ley, en los países británicos hay adultos que deben responsabilizarse de otra persona. También de sus acciones que partan de esa relación. Los adultos responsables, o "appropiate adult", son gente común a la que se le pide que apoye a detenidos menores de edad o a quienes están en condición de "vulnerabilidad". Como un asesino serial, por ejemplo. De eso y la posibilidad de enamorarse va esta miniserie inglesa de sólo dos capítulos.

Basada en hechos reales, enfatizado con datos mostrados durante los episodios, conocemos al par de protagonistas. De un lado, está el asesino Fred West, quien posee una personalidad dominante que atrapa a la Sra. Leach, su adulto responsable. Conocemos el porqué es culpado y las revelaciones que hace, las cuales suben de tono, entre la crueldad y el terror. Hasta ahí, tal vez no difiere en nada a otro tipo de ficciones policíacas.

Vía Sundance.tv

Pero en este thriller psicológico hay un ingrediente extra, y no precisamente sangre. Hay amor. No tendría nada qué ver, pero seduce. Es ahí donde importa esta ficción, al acercarnos a la vida de la otra protagonista. Vemos cómo el trabajo de la Sra. Leach como adulto responsable repercute con su familia en casa.



Sus salidas del hogar, cada vez más constantes y argumentadas, son el inicio de algo mucho más poderoso y oscuro. Porque la tensión romántica que se crea y crece entre los dos, es brutal y extraña. También inverosímil, pero nada comprado con la bomba que está por estallar, la cual obviamente impacta y no se espera.

Vía dailymail.co.uk

De lo social a lo moral, Appropiate Adult es una miniserie fascinante. Además de recrear un hecho real, plantea una pregunta. Sin cuestiones como el polígrafo y demás, ¿se puede saber qué es la verdad para una persona? Nada de si es correcto o incorrecto, sólo la verdad. Y mejor aún, ¿en qué momento las verdades de un asesino serial se transforman en algo atractivo, cuando sabes que todo son mentiras? Escarbar entre esto y "lo normal", lleva a ver qué hay de cierto en las relaciones amorosas durante su punto más alto, y cuánto de falso en la lucha por agradar y mantenerlo como algo real.