Una película de acción nunca fue tan conmovedora, original y polémica como en El perfecto asesino, de Luc Besson
¿Una película violenta puede ser hermosa? El perfecto asesino de Luc Besson (guionista y director) dice que sí y que además, te puede mantener pegado frente al televisor con una historia conmovedora, original y polémica.
Esta película me ha parecido brillante. Sería lógico llenarla de halagos con adjetivos positivos, acercándome a esas frases de las portadas de las películas que hacen revistas o críticos de cine. Imagino el mío: “Historia impactantemente seductora y conmovedora”. Igual y no funciona porque lo de “impactantemente seductora” no lo he escuchado, así que quién sabe si este bien –por eso de que las frases suelen ser las mismas-. Pero quiero hacer un esfuerzo por describir y detallar que me hace calificarla así.
El perfecto asesino es brillante por su atrevimiento para hablar
de la violencia desde los ojos de una niña (Natalie Portman) a la que
han golpeado física y psicológicamente toda su vida. Sería normal
mostrar el proceso de ello. Y sí, lo vemos. Pero El perfecto asesino no haría sólo eso: es una película con un tono mucho más variado y oscuro. Aún hay más.
El perfecto asesino es brillante por hacer de esa niña una niña astuta y despierta, además de llevarnos junto a ella en cada una de las acciones de su vida que desgarran. (Nunca he estado más cerca de llorar en una película que en ésta -en verdad lastima lo que ve el espectador, todo es tan real. Pero, ¡epa! Para eso hay risas. Y ésta película lo tiene en momentos puntuales y adorables que me hacían pensar: ¡Esto es dulce!).
Y aquí aparece ese asesino increíble llamado Leon (Jean Reno). Entonces vemos una sinceridad por
mostrar dos protagonistas solitarios con formas mucho más similares de
ser de lo que aparentan: igual de valientes, igual de amables, igual de
frágiles.
Es ahí cuando la increíble niña Natalie Portman hace una actuación de auténtica señorita seductora, que deja a uno deslumbrado (tal cual). Así como al asesino solitario Jean Reno.
¿Y la acción? Maldita sea, qué forma de llevar el suspenso y las secuencias de acción. Con formas tan variadas, tan originales, tan disfrutables de ver por el show que se está armando y no termina. El maldito Gary Oldman hace que se le odie como villano.
El perfecto asesino es una película que atrapa por su guion creativo -siempre basado en el entretenimiento de contar una historia- y permanece en la mente del espectador, además de mostrar una crítica social hacia la violencia y el mundo de las drogas, con las consecuencias de este: partir familias y seres humanos.